La Policía Municipal incorpora un nuevo agente

27/03/2020
Ejercerá como agente auxiliar hasta que se oficialice su cargo. Alumno de la academia de Arkaute se suma al cuerpo de la Policía Local para reforzar el servicio durante la pandemia de COVID-19.

 

Un nuevo agente se ha incorporado esta semana a la plantilla de la Policía Municipal de Aretxabaleta. Es galdakaotarra, tiene 27 años y ejerce desde el pasado martes como agente auxiliar de la guardia urbana, a la espera de ser nombrado de forma oficial agente de Policía Local.

Se trata de uno de los y las 300 aspirantes a policías locales que han interrumpido su formación tras la suspensión temporal de la actividad docente en la Academia Vasca de Policía y Emergencias de Arkaute, dentro de las medidas encaminadas a frenar la expansión del coronavirus, y que también incluyen a los 617 alumnos de la 28 promoción de la Ertzaintza.

El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha movilizado a estos alumnos para reforzar los servicios policiales durante la pandemia de COVID-19, con el objetivo de desarrollar tareas “dentro de las competencias que pueden”, ya que todavía no son agentes en servicio.

Con la incorporación del nuevo agente, que se oficializará en verano, se cubre una de las dos plazas vacantes del cuerpo de Policía Local, elevando a cuatro el número de efectivos actuales. Queda pendiente la plaza de jefe de la Policía Municipal, cuya convocatoria se espera lanzar en los próximos meses.

El alcalde, Unai Elkoro, insiste en que la seguridad ciudadana es “prioritaria” para el Ayuntamiento y que, por tanto, el cuerpo de la guardia urbana es el “recurso más importante” dirigido a alcanzar este objetivo. También se refiere a la labor que los agentes están desarrollando para garantizar el cumplimiento del Decreto del estado de alarma.

SE INCREMENTA LA VIGILANCIA

Desde que se decretara el estado de alarma para detener el contagio por coronavirus, se ha reforzado, de lunes a domingo, la vigilancia de la Policía Municipal en las calles del municipio, así como en el entorno de los comercios abiertos, farmacias, el centro de salud y el supermercado Eroski. También se está controlando el uso de vehículos y el tránsito peatonal de los ciudadanos, aplicando normas de uso restringido.

En este tiempo se han realizado más de 300 intervenciones por diferentes motivos, sobre todo, relacionadas con la movilidad de vehículos y pasear al perro lejos de la vivienda. Esto último es una excepción al confinamiento, pero existen restricciones cuyo incumplimiento pueden costar entre 100 y 30.000 euros o, incluso, 600.000 euros si es muy grave.

No obstante, según destacan desde la Policía Local, la respuesta de los y las atxabaltarras a la situación de confinamiento va “mejorando de un día para otro”. Es, por ello, que el Ayuntamiento agradece “la implicación de la ciudadanía” ante las medidas adoptadas contra la pandemia.